13/12/23
Descubre los beneficios de los aceites esenciales
Los aceites esenciales se han vuelto muy populares durante los últimos años. Sin embargo, está demostrado que su uso se remonta a varios siglos atrás, siendo de las primeras curas naturales. Para quién no esté habituado a este concepto, puede generarle dudas, aunque muchas de estas prácticas han estado presentes en nuestro día a día apodadas como “remedios de abuela”.
Antes de empezar a explicar cómo funcionan y qué aportan, hay que tener claro que tienen un respaldo científico pero que, sin embargo, su uso no debe de verse como un fármaco o tratamiento médico, sino como algo complementario para el bienestar del día a día. También hay que saber que es mejor evitar este tipo de tratamientos durante el embarazo o periodo de lactancia, pues no se tienen estudios de cómo puede afectar al bebé.
La extracción de las esencias se consigue tras destilar las plantas, normalmente al vapor o con agua caliente. Estas esencias son las que les ayudan a protegerse de enfermedades, bacterias o daños que hayan podido sufrir. Se puede utilizar cualquier parte de la planta (hojas, flores, raíces, tallos…) y sus propiedades pueden ser varias: antisépticas, analgésicas, calmantes, antibacterianas… todo dependiendo de la planta y la parte de esta que se utilice.
Hay que tener en cuenta que antes de utilizar las esencias, estas deben de ser diluidas con otros elementos como agua, aceites naturales (como el de almendra o coco) o cremas. Si no se diluyen bien, al ser esencias puras, pueden causar efectos secundarios como irritaciones o reacciones negativas en la piel. Además, las dosis deben adaptarse a la persona que las vaya a utilizar, siendo los niños y ancianos los más sensibles a este tipo de tratamientos.
¿Cuáles son las plantas más comunes y sus beneficios? Existen muchas plantas que se utilizan, sin embargo, hay algunas más populares y comunes que otras.
- Camomila: Antiinflamatorio y ayuda a la relajación
- Eucalipto: Ayuda a reducir los síntomas del resfriado como la tos o las irritaciones nasales, también los dolores musculares
- Lavanda: Relajación y ayuda ante los problemas de sueño, migrañas y estimula la cicatrización
- Menta: Digestivo y ayuda a combatir los problemas de dolor de cabeza
- Naranja y mandarina: Combinado con terapias tradicionales, ayudan a reducir la ansiedad y el estrés
- Árbol del té: reduce la inflamación muscular, además que puede utilizarse a la hora de querer evitar los piojos debido a sus cualidades antisépticas.
Sus tipos de consumo más habituales son: Inhalación (a través de un difusor es la forma más segura, pero también se puede diluir en agua caliente aprovechando su vapor o aplicándolo directamente a una tela); Vía tópica (sobre todo para la realización de masajes, si se usa este método se recomienda hacer una prueba previa para evitar una reacción negativa en la piel); Añadiéndolo a la rutina de baño (aplicándolo en jabones o directamente al agua de la bañera, aunque hay que controlar bien la dosis). Por otra parte, es peligroso ingerir este tipo de esencias, aunque es verdad que algunas en concreto no suponen ningún riesgo, es mejor evitarlo.
Los aceites esenciales tienen muchos beneficios, y, con un buen uso y evitando riesgos, pueden ser tus grandes aliados en tu día a día. Estos son solo unos ejemplos, pero existe un mundo enorme que merece la pena investigar.