¿Disfruta haciendo senderismo rodeado de naturaleza? Desde Son Jaumell le desvelamos cinco enclaves únicos en el Parc Natural de la Península de Llevant dónde puede realizar las mejores rutas de senderismo en Mallorca. ¡Con vistas de ensueño y lugares escondidos de la isla con mucho encanto!
La primera ruta de senderismo elegida tiene una duración de tres horas y media, y es ideal para disfrutar de los paisajes únicos que puede ofrecer el Parc Natural de la Península de Llevant. Comienza en Cala Estreta, una pequeña y tranquila cala ubicada en el este de la isla. A partir de ahí y en dirección norte, se debe recorrer la costa hasta llegar a la Torre de Matzoc. Esta torre, erguida desde 1751, brindará la oportunidad de contemplar la inmensidad del mediterráneo hasta la isla de Menorca desde una perspectiva única y privilegiada.
Una vez pasada la torre se debe seguir recorriendo la costa, donde encontraremos varias calas vírgenes. A lo largo de todo el recorrido no será extraña la presencia de cabras, que pastan en las escarpadas rocas que dibujan el paisaje.
Unos kilómetros después se abrirá ante nosotros un amplio paraje de arena virgen, S’Arenalet des Verger. Disfrutar de la experiencia de esta tranquila y alejada playa de arena blanca es sin duda algo irrepetible.
La segunda de las mejores rutas de senderismo en Mallorca es la Atalaya de Sant Jaumell. Esta Atalaya se encuentra en el término municipal de Capdepera, un hermoso pueblo al cual su espectacular muralla le otorga un aspecto medieval único.
La ruta empieza en Cala Agulla, una hermosa playa rodeada de vegetación, pinos y dunas que forman el parque natural del parque de Llevant. Desde el aparcamiento de esta playa, se debe cruzar el bosque de pinos en dirección a la cima de la atalaya.
En poco más de una hora habremos llegado a la cima de Sant Jaumell, desde donde se puede disfrutar de unas espectaculares vistas del Mar Mediterráneo, así como de la belleza del Parc Natural de la Península de Llevant, Cala Mesquida, Cala Agulla y la localidad de Cala Ratjada.
Para llegar a esta cala tendremos que llegar al pintoresco pueblo de Betlem, alejado del bullicio de zonas turísticas y rodeado de vegetación y montaña a partes iguales.
En el extremo este del pueblo se encuentra un antiguo camino de carros, que se dirige en paralelo a la costa hacia Es Caló. Durante una hora se debe recorrer este camino, el cual linda por una parte con las calas del azul más turquesa de Mallorca y por la otra parte por picos de hasta 500 metros de altura que coronan el mural montañoso que recorre todo el camino.
Después de una hora recorriendo este camino llegamos a Es Caló, que destaca por sus aguas transparentes y por la tranquilidad que emana del lugar.
La ruta se inicia en Cala Nau, desde donde seguiremos bordeando la costa en dirección Sa Coma. Este recorrido destaca por su belleza natural, donde la vegetación y el Mar Mediterráneo se cruzan y nos acompañan en todo el recorrido.
Al cabo de unos veinte minutos de ruta podremos identificar la torre “Es Castell”, que data del siglo XVII. Esta torre está abierta al público, por lo que su azotea ofrecerá la oportunidad de disfrutar de unas impresionantes vistas de toda la costa que le rodea.
Siguiendo el recorrido de Sa Punta d’en Amer, podremos encontrar diversas piscinas naturales surgidas después de la extracción de “marès” en diversas canteras ubicadas en la zona costera. Estas piscinas cautivan a todo aquel que las ve debido a los ángulos tan característicos que las forman. Sin duda un bonito paraje donde disfrutar de dos horas de senderismo.
En último lugar hemos añadido un enclave que no forma parte del Parc Natural de la Península de Llevant, pero se encuentra cerca del mismo.
Se trata de una ruta totalmente llana, comprendida entre las poblaciones de Son Bauló y Son Serra de Marina, la cual tiene una duración de dos horas y treinta minutos. El principal atractivo de esta ruta se encuentra en la finca de Son Real, que contiene parte del patrimonio arqueológico más importante de las Illes Balears.
Para iniciar la ruta se debe partir desde Son Bauló en dirección este bordeando la playa, que irá alternando entre arena y rocas durante todo su recorrido. Ya en mitad del recorrido nos encontraremos con la Necrópolis de Son Real, donde se conservan hasta 109 tumbas que datan del año 1.500 A.C., sin duda una oportunidad única de conectar con la prehistoria de la isla y su extinta cultura naviforme. Siguiendo por el mismo camino encontraremos la playa de Son Real, una playa virgen rodeada de pinos, ubicada en un espacio natural protegido.
La ruta termina en la población de Son Serra de Marina, una pequeña y costera población donde poder disfrutar de un final de día tranquilo.
¡Y hasta aquí las mejores rutas de senderismo de Mallorca! ¿Ha hecho ya alguna de ellas?